Qué agradable es después de un largo día de trabajo relajarse en una bañera caliente con mucha espuma aromática o con la adición de aceites esenciales calmantes. Al mismo tiempo, disfrutando de este placer, también puedes limpiar tu piel de impurezas, lo que requiere el cumplimiento de las reglas de higiene personal. Además, algunos especialistas afirman que un baño caliente tiene un impacto mucho más positivo en el cuerpo que solo relajación. ¿En qué consiste este beneficio y existe algún peligro en este tipo de procedimientos acuáticos? El blog GoBeauty lo investigó.
¿Es posible tomar un baño caliente?
El agua, que tiene una temperatura bastante alta, puede brindar muchos beneficios al cuerpo humano. En primer lugar, ayuda a eliminar toxinas del cuerpo y de la piel. Con el contacto prolongado con el agua caliente, la piel se ablanda, lo que provoca que los poros se abran al máximo. Por cierto, después de un baño caliente, sería útil exfoliar las áreas problemáticas con un exfoliante y luego aplicar una mascarilla nutritiva o hidratante. La capa de células muertas se elimina mejor con un baño caliente que con el agua a temperatura normal, y los componentes activos de los productos cosméticos se absorben mejor en la piel profundamente limpia.
Tomar un baño caliente ayuda a lidiar con el estrés y la tensión nerviosa de manera más rápida y efectiva que permanecer en agua tibia. También ayuda a combatir el insomnio, la depresión, la apatía y la agresividad. Además, el agua caliente dilata los vasos sanguíneos, mejora la circulación sanguínea y tiene un efecto positivo en la calidad de la sangre.
Los beneficios de los baños calientes no se detienen ahí. El contacto con agua a alta temperatura favorece la quema de grasa, alivia la tensión muscular y ayuda a eliminar el exceso de alcohol en la sangre, lo que permite una desintoxicación más rápida. Además, un baño caliente es una excelente manera de calentarse en épocas frías. Después de un baño caliente tras un entrenamiento deportivo intenso, eliminarás la fatiga y estarás lleno de energía nuevamente.
¿Para quién puede ser perjudicial el baño caliente?
Sin embargo, el agua excesivamente caliente y la permanencia prolongada en la bañera pueden tener efectos negativos en la salud: puede provocar inflamación de las venas y formación de coágulos en personas con enfermedades del sistema venoso, y durante la menstruación puede causar hemorragias intensas. La alta temperatura del agua y la exposición prolongada a ella pueden afectar la calidad del esperma en los hombres, reducir las posibilidades de concepción e incluso causar infertilidad. Las mujeres que planean quedar embarazadas también deben evitar los baños calientes, ya que la temperatura alta del agua puede impedir que el óvulo se adhiera a la pared del útero. Las mujeres embarazadas deben evitar baños muy calientes, especialmente en el tercer trimestre. Los ancianos deben ser cautelosos con los baños calientes, y no es recomendable exponer a los niños pequeños a temperaturas de agua tan altas.
El baño caliente está absolutamente contraindicado en enfermedades como:
- Insuficiencia cardíaca
- Hipertensión e hipotensión
- Angina de pecho
- Cáncer
- Cirrosis hepática
- Epilepsia
- Tuberculosis
- Arteriosclerosis
- Diabetes.
Pocas personas saben que un baño caliente puede ser especialmente peligroso para aquellos que toman medicamentos. Los estudios han demostrado que algunos medicamentos, como los analgésicos, pueden volverse extremadamente peligrosos cuando se combinan con altas temperaturas. Además, esta advertencia no siempre aparece en las instrucciones de los medicamentos.
Baño tibio
El baño más cómodo y beneficioso para el cuerpo humano es el baño tibio. La temperatura del agua debe estar entre 33 °C y 37 °C, es decir, similar a la temperatura corporal. El agua tibia relaja los músculos, calma la piel, alivia la tensión nerviosa y tiene un efecto positivo en los órganos internos. Además, el agua tibia no daña el cabello ni la piel (especialmente la piel sensible), y la maceración de la piel (arrugas en los dedos) ocurre más lentamente.
Es recomendable tomar este tipo de baño antes de dormir o de una cercanía íntima. Sin embargo, incluso en agua tibia, no es aconsejable permanecer demasiado tiempo. Veinte a treinta minutos son suficientes para disfrutar de los beneficios sin causar daño al cuerpo.
¿Qué hacer después de tomar un baño caliente?
Después de sumergirse en agua caliente, independientemente de la duración del baño, toma una ducha fría durante un minuto, luego sécate bien y vístete. En las dos horas siguientes a la sesión, es necesario restaurar el equilibrio hídrico y de sal, así como el contenido de vitamina C, ya que se pierden durante la transpiración. Aquí te doy tres consejos clave:
- Bebe agua sin hervir (de manantial o estructurada) durante 30-40 minutos para restaurar el equilibrio de sales.
- Restaura el equilibrio de sales con sal mezclada con semillas de sésamo secas. Muele la mezcla en un mortero en una proporción de 6:4 y cómela con verduras crudas (al menos tres tipos diferentes). Lo ideal es usar sal marina, o en su defecto, sal yodada. Después de consumir esta mezcla, no se recomienda beber nada durante 40 minutos.
- Para restaurar el equilibrio de la vitamina C, bebe té verde, infusión de escaramujo, hojas de frambuesa o grosella.
¡Que disfrutes de tus baños!