Todos han escuchado ya sobre la popular tendencia en yoga conocida como fly yoga. También se le llama yoga en hamacas o antigravitatoria, pero el concepto es el mismo: flotas en el aire, te relajas y realizas varias asanas. ¿En qué se diferencia la fly yoga de la yoga tradicional y qué resultados se pueden esperar de estas prácticas? En este artículo lo descubrirás.
¿Qué es fly yoga?
Fly yoga, o «yoga antigravedad», es un estilo de yoga fundado por el bailarín y gimnasta de Broadway, Christopher Harrison, en los años 90 del siglo XX. El nombre proviene de la palabra en inglés «fly», que significa «volar». La yoga antigravedad se enfoca en el perfeccionamiento físico y espiritual. Durante la realización de asanas y ejercicios gimnásticos en suspensión, el cuerpo se estira desde los talones hasta la cabeza. En la posición boca abajo, el cuerpo activa automáticamente su mecanismo de autorregeneración. Los entrenamientos mejoran la salud general y aumentan la destreza. Además, con entrenamientos regulares, se garantiza un buen estado de ánimo y una buena figura.
Diferencias con el yoga tradicional
Lo que hace único a este estilo es el uso del aire y una hamaca especial, suspendida a un metro del suelo, que permite que la columna se estire suavemente, relajando los tendones y aumentando la movilidad de las articulaciones sin tensión.
La mayor ventaja del yoga en hamacas son las asanas invertidas fáciles de realizar, que dirigen la sangre al cerebro y alimentan sus células, lo que mejora la concentración. Los seguidores de la yoga antigravedad afirman que las personas «suspendidas» tienen la posibilidad de realizar asanas que, en la práctica tradicional, son extremadamente difíciles debido a la tensión excesiva en el cuerpo, especialmente en la espalda y el cuello.
En la fly yoga, se pueden lograr resultados visibles rápidamente. Mientras que en el hatha yoga algunas asanas pueden requerir años de práctica, con las hamacas todo sucede mucho más rápido. Las personas pueden corregir su forma física y tonificar los músculos; el cuerpo se vuelve más flexible y ágil.
Existe el mito de que con el yoga no se pierde peso, pero esto es falso. Si se practica regularmente, los efectos de pérdida de peso no tardarán en aparecer. Además, el efecto no desaparecerá en poco tiempo, ya que el yoga normaliza el metabolismo.
Beneficios de la fly yoga
La yoga aérea ayuda a mejorar el cuerpo de manera funcional en los siguientes aspectos:
- Fortalecimiento del marco muscular y la plasticidad de todo el cuerpo (gracias a que la mayoría de las posturas se realizan en suspensión, se activan todos los grupos musculares y articulaciones);
- Recarga de energía (después de las clases, independientemente del grado de dificultad, se siente una sensación de ligereza y de flotar, ya que los ejercicios de relajación se combinan con los de fuerza, lo que produce un efecto de acumulación de energía);
- Relajación y equilibrio del sistema nervioso durante las sesiones (las asanas relajantes especiales con efecto de balanceo estabilizan la psique, desarrollan resistencia al estrés y mejoran el estado de ánimo);
- Estiramiento de los principales grupos musculares (la hamaca distribuye uniformemente la carga y facilita la relajación, lo que hace que las posturas orientadas al estiramiento sean fáciles de realizar de manera rápida y natural).
Contraindicaciones para la práctica
Como cualquier otro tipo de entrenamiento, la fly yoga tiene algunas contraindicaciones:
- Presión arterial alta constante;
- Enfermedades cardíacas crónicas;
- Enfermedades oculares;
- Trastornos mentales;
- Patologías de la columna vertebral;
- Enfermedades de la sangre;
- Presencia de tumores;
- Traumatismos craneoencefálicos;
- Cirugías recientes;
- Embarazo.
Antes de practicar, los instructores recomiendan comer algo ligero o no comer en absoluto. Lo principal es no excederse con la comida.